El príncipe azul si existe

Desde pequeños, hemos visto películas románticas que nos enseñan una forma de amor poco realista, pese a que sabemos que son relaciones poco comunes, soñamos con que podamos vivirla en nuestra vida diaria creándolo en forma real.

Pero ¿qué pasa con nuestra vida diaria y nuestras relaciones cuando nos damos cuenta de que, lo que vemos desde pequeños en películas, en caricaturas, en Disney, etc. no son reales, y que los problemas que vivimos día a día no se arreglan en menos de hora y media?

Quitemos de la cabeza al hombre perfecto, a las relaciones perfectas, a ese príncipe azul que rescata a la princesa, y quitemos de nuestra cabeza el “vivieron felices por siempre”. Esto no quiere decir que no se logre la felicidad en la relación; es saber que se necesita seguir trabajando día a día para lograr la felicidad. Que podrá existir problemas, mismos que todos los días debemos de trabajar para mejorar y crecer. Que una relación depende de la comunicación, la confianza y el amor al otro, pero también a uno mismo, y que, si estoy bien conmigo, podre estar bien con el otro.

El príncipe azul sí existe, y es esa persona con quien tendrás problemas pero que podrás solucionarlo con amor y comunicación. Será esa persona con la que podrás ser tú mismo en todo momento siendo un equipo al mismo tiempo.

El príncipe azul si existe, y es con quien te sentirás pleno, tendrás confianza, existirá un respeto integro en todo momento. Con quien compartirás momentos divertido y felices y también quien te acompañará durante los momentos difíciles y tristes.

El príncipe azul si existe, es con quien lograras crecer y cumplir tus matas, tus sueños y objetivos, y al mismo tiempo tu pareja seguirá creciendo y desarrollándose de igual forma. Es con quien lograrás un equilibrio, con quien aprenderás a salir de las adversidades.

EL príncipe azul si existe, y no digo que sea perfecto; podrá cometer errores, pero no con la malicia o intensión de dañarte y lo más importante, será humilde y sabrá pedir perdón y hacer acciones para reparar los daños causantes. Siempre buscará en equipo lo mejor para ambos; sabrás comunicarse asertivamente, se tomarán decisiones en conjunto y por el bien de ambos y buscarán su felicidad propia y colectiva.

El príncipe azul si existe, y es aquel con objetivos y metas en común contigo; con valores similares, con quien el respeto no es una obligación sino parte de su vida. Donde te sientes en la misma sintonía, y simplemente las cosas fluyen, eres parte de la misma energía, y buscan su bienestar creando el bienestar en el otro.

El príncipe azul si existe, no como en las películas, sino como en la realidad, pero sin duda es el que mejor quedará para hacer un gran equipo en conjunto. No se si ese príncipe azul sea hombre o mujer, simplemente se que la película con final feliz la construimos cada uno día a día.